sábado, 17 de octubre de 2009

DEBES APRENDER DE ESTO




Oscurecido en mis renegados vacios de visiones, tú estás.
Cuando no encuentro tú imagen que arrastra mis espasmos, me destrozo.

El cabello alucinante como el tuyo... hechíza mis palabras...
Más no encuentro respiro a tan alucinante néctar.

Esos labios de pasión que me estampas al mirarte...
Y esas calidas y delicadas manos de mi Angel Amado... Son mi pecado.

He de confundirme con el resto para que no veas en mi la pasión que tengo
y Desaparezco entre mis razones cotidianas para no seguir sufriendo.

Ruinoso como un rey en desolación sin su corona me reflejo en tus ojos.
Son mis corazas las que protegen mi alma del destierro amenazante.

Sentado en mi sombra, rodeado de mi sangre que impregna mi depresión...
Veo aquella luz que presume mis alientos...

Tan pequeño y tan vulnerablemente encarnizado en mis ausencias de tu piel me
aferro en un plácido letargo.

Errante como aquel fugaz bálsamo de tu aroma primoroso me agasajo hacia tí.
Esclarezco tu rostro célico de la noche inerte entre caricias y llantos.

Veo a traves de tus luceros que los sueños encapuchados en vida son tu lozanía.
Cortejo a cada uno de ellos con mi sagaz atrevimiento y afición.

A pesar de las aprensiones que nos castigan aflicciónes momentáneas,
Subsisto en estigmatizar tus palmas con mi túnica de abnegacion por tí.

No sabes lo que sucitas al posar tus textos en señas cautivantes de Amor.
Soy un siervo confinado a tu carnaval de gracia inimitable en el tiempo.

Debes aprender de esto, que es mi locura y mi esclavitud por tu ser, en mi silencio.

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